A mi hijo le duele el pecho ¡Se cansa! ¿Todo dolor torácico es malo, se trata de una enfermedad grave? El dolor torácico es una causa poco habitual de consulta para el pediatra en atención primaria o en los servicios de urgencias hospitalarios (0.25-0.6%) pero es un motivo frecuente de consulta en el caso del cardiólogo infantil.
Muy pocas veces se debe a una enfermedad grave o importante. La tendencia a compararlo con el adulto genera una gran ansiedad y preocupación tanto en el niño como en los padres, que muchas veces lo hacen sinónimo de afectación cardiaca.
Las principales causas de dolor torácico en el niño son las siguientes:
- Idiopática: la más frecuente (35%)
- Origen musculoesquelético o condrocostal (30 %)
- Psicógena (14%), como ansiedad, tensión, estrés, depresión o desórdenes de conversión.
- Causa respiratoria (12%), la más frecuente de este grupo es el asma inducida por el esfuerzo, otras pueden ser neumotórax, pleuritis, tos, neumonía.
- Alteraciones gastrointestinales (4-7%).
- Origen cardiaco (1-4 %).
En cuanto a las causas cardiacas de dolor torácico en el niño, se puede dividir en tres apartados: alteraciones cardíacas congénitas, alteraciones adquiridas y arritmias.
1. Alteraciones cardíacas congénitas:
a. Estenosis aórtica.
b. Miocardiopatía hipertrófica.
c. Prolapso de la válvula mitral.
d. Alteraciones coronarias congénitas, la más frecuente es el origen anómalo de la coronaria izquierda del tronco de la arteria pulmonar.
2. Alteraciones cardíacas adquiridas
a. Pericarditis
b. Enfermedad de Kawasaki
3. Arritmias
- Otras: algunos pacientes presentan un complejo de signos y síntomas: dolor torácico, cefalea, mareos, visión borrosa (halos luminosos o destellos blanquecinos u oscuros), sudación de manos y pies que al estrés o tensión se quedan frías, orina concentrada (amarillenta), cansancio sobre todo vespertino; soplos funcionales; desmayos o desvanecimientos, y tienden a ser ligeramente ansiosos y/o aprehensivos; ocasionalmente palpitaciones, eventualmente cólicos; a los cuales podrían integrarse un trastorno del sistema nervioso autónomo (disautonomías, síncope neurocardiogénico) con potencial repercusión a nivel cardiaco a largo plazo. Nota: Consultar la página de disautonomía.
